Encuentro de Miguel Díaz Canel con el Presidente namibio, Hage Geingob

“Nuestra casa es su casa”, aseguró hoy, en español, el Presidente namibio, Hage Geingob, al Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República de Cuba, al iniciar las conversaciones oficiales entre ambas delegaciones, en la mañana de este domingo, en la sede de la Casa de Estado.

En Namibia, dijo, “consideramos a los cubanos como hermanos, por lo tanto, confío en que usted se sienta aquí como en casa”.

Fue esa la calidez que marcó todo el diálogo, que se extendió por espacio de una hora, y estuvo precedido por un encuentro “tête â tête”, como se dice en términos diplomáticos, entre los dos presidentes.

Es la segunda jornada de trabajo del Presidente Díaz-Canel en Namibia, donde este sábado participó como invitado de honor en la Conmemoración por el Día de los Héroes. Fue sumamente emocionante participar en ese acto que tiene mucho que ver con la esencia de cómo surgieron nuestras relaciones, valoró el Jefe de Estado cubano en un momento de las conversaciones.

Foto: Alejandro Azcuy Domínguez.

Acerca de la continuidad de los nexos y su fortalecimiento comentaron también los mandatarios, ambos parte de nuevas generaciones de cubanos y namibios que tienen en sus manos la responsabilidad de preservar y seguir desarrollando las históricas y entrañables relaciones que desde hace más de tres décadas existen entre las dos naciones.

“Es nuestra expresa voluntad, aseguró el mandatario caribeño, continuar profundizando y ampliando esas relaciones”. Tenemos el reto, dijo, de que “esos sentimientos también sean llevados a las nuevas generaciones de cubanos y namibios, y que nunca se pierda esa memoria histórica que nos unió y se forjó en la lucha”.

Reconocemos en usted, afirmó, alguien que ha sido continuador de esas relaciones iniciadas por Sam Nujoma, mantenidas también por Hifikepunye Pohamba, y que ahora usted alimenta de manera ejemplar.

Por todo ello, y además por los méritos del mandatario namibios, así como su amistad hacia la Mayor de las Antillas, el Presidente Díaz-Canel dio a conocer durante el diálogo la decisión del Estado cubano de otorgarle al mandatario Hage Geingob la máxima distinción que otorga nuestra nación: la Orden “José Martí”.

A continuación, invitó al Presidente a realizar una visita oficial a la isla caribeña, ocasión que sería propicia para dar continuidad a los temas abordados en esta ocasión y además para poder condecorarlo.

La delegación cubana la integran el miembro del Buró Político y canciller Bruno Rodríguez Parrilla; el titular de Salud Pública, José Angel Portal Miranda; la miembro del Consejo de Estado y rectora de la Universidad de La Habana, Miriam Nicado García; el jefe del Departamento de Relaciones Internacionales del Comité Central del Partido, Emilio Lozada García; y la viceministra primera del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Ana Teresita González Fraga, así como otros funcionarios de Relaciones Exteriores.

Al término de las conversaciones oficiales, en presencia de ambos mandatarios y de sus respectivas delegaciones oficiales, se firmaron tres acuerdos, asociados fundamentalmente al desarrollo de las relaciones institucionales de cooperación en la esfera de negocios; así como a la realización de consultas políticas diplomáticas para fortalecer las relaciones bilaterales y fomentar los intercambios sobre temas de interés común.

Foto: Alejandro Azcuy Domínguez.

APOYO, CARIÑO Y SOLIDARIDAD PARA CUBA

Emotivas y sumamente simbólicas han sido las jornadas vividas por la delegación cubana que acompaña al Presidente Díaz-Canel en esta visita oficial a la nación africana. Aquí, el cariño hacia Cuba se siente de manera intensa y distinguió también las palabras pronunciadas por el mandatario Hage Geingob durante las conversaciones oficiales de este domingo.

A Cuba, significó, todo nuestro reconocimiento y admiración, por el valeroso papel desempeñado, bajo el liderazgo de Fidel Castro Ruz, para el logro de “nuestra definitiva independencia”. Entonces, recordó, el único camino que teníamos era la lucha y “nunca vamos a olvidar el coraje y la voluntad de los combatientes internacionalistas cubanos que llegaron a apoyar a nuestro país”. Para todos ellos, refirió el mandatario namibio, toda nuestra gratitud.

Los cubanos, subrayó, no vinieron a ayudarnos para conseguir nada a cambio, sino por una cuestión de principios; vinieron a ayudarnos, por nuestra libertad y también la de otros pueblos. “Los cubanos pelearon en Namibia como si lo hicieran por Cuba”, sentenció.

Y por ese gesto de Cuba, reflexionó, “nosotros siempre estaremos agradecidos y siempre estaremos apoyando al pueblo de Cuba, por eso nuestra actuación en defensa de Cuba se basa en ese agradecimiento que sentimos por ustedes”.

Tras recordar su primera visita a la Mayor de las Antillas, que tuvo lugar en la década de los 70, el Presidente Geingob consideró que estas jornadas de trabajo junto a la delegación cubana constituyen una oportunidad para continuar el legado histórico que ha marcado las relaciones entre ambas naciones y tiene sus raíces en las ideas y hechos respaldados por Fidel y Raúl.

En tal sentido, reafirmó la decisión de trabajar para llevar adelante la implementación de múltiples acuerdos de cooperación que resultarán mutuamente beneficiosos. Luego de agradecer la colaboración que por más de 30 años ha existido entre Cuba y Namibia, refirió, que en estos momentos la misma se desarrolla en las áreas de salud, educación, pesca, construcción, deporte y otras.

De manera especial, significó los aportes que la Mayor de las Antillas ha hecho aquí en lo relacionado con el sector de la Salud. “Los profesionales cubanos de la Salud son reconocidos y admirados en todo el mundo, y nosotros tenemos la suerte de contar con varios de ellos que prestan servicios en instituciones médicas de todo el país”, destacó.

“Algunos de nuestros médicos no quieren ir a las zonas rurales de Namibia, y sin embargo los cubanos están por todas partes”, reconoció.

Al hacer referencia al injusto bloqueo económico, comercial y financiero a que es sometido el pueblo cubano por parte del Gobierno de los Estados Unidos, el Presidente namibio reiteró que su país continuará “demandando que se levante”, porque es “imposible entender esa situación, se trata de una cuestión de derechos humanos”.

Desde Cuba, gratitud para Namibia

Para nosotros es muy importante en esta visita, aseveró el Presidente Díaz-Canel a su homólogo namibio, e independientemente de las condiciones que se vivan en Cuba producto del bloqueo, “siempre estaremos dispuestos a colaborar, a cooperar con el pueblo de Namibia” y a seguir ampliando nuestras relaciones de todo tipo.

Luego de comentar sobre diferentes momentos que marcan los vínculos entre Cuba y el continente africano, el Jefe de Estado recordó que justamente por tantos elementos asociados a estas tierras que marcaron la formación de nuestra nacionalidad, Fidel decía que “nosotros éramos latinoafricanos y nuestras raíces africanas las sentimos y las defendemos con sano orgullo”.

Foto: Alejandro Azcuy Domínguez.

En sus palabras también la evocación a la bonita amistad que existió entre el Comandante en Jefe y Sam Nujoma, la cual dejó un legado “que nosotros defendemos”.

Al hacer referencia al desarrollo de proyectos conjuntos en beneficio de ambos pueblos, por más de 30 años, Díaz-Canel dijo que para los cubanos que han cumplido misión en este país, ello ha significado, además, un crecimiento espiritual, un crecimiento humano y también como revolucionarios.

Con especial agradecimiento, el dignatario caribeño se refirió a la coherencia, firmeza y lealtad con que Namibia ha denunciado durante todos estos años el injusto bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el Gobierno de los Estados Unidos a Cuba. Su gratitud, sobre todo, destacó, por ser Namibia la promotora “de una iniciativa para que año por año, en la Unión Africana, se aprueben resoluciones en contra de ese bloqueo y a favor de Cuba”, y también por el voto enérgico con que en la Asamblea General de las Naciones Unidas defienden la resolución cubana contra esa política estadounidense contra nuestro país.

Igualmente, dio las gracias a Namibia por las donaciones enviadas a la Isla para ayudarnos a enfrentar complejos escenarios como la pandemia de la COVID-19, la explosión del Hotel Saratoga, el incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas y otros.

Tras manifestar su satisfacción por todo lo que “hemos avanzado en nuestras relaciones” y el empeño puesto para fortalecerlas, Díaz-Canel comentó acerca de la ampliación de proyectos en campos como la Educación Superior, Cultura, Deporte y Salud. Asimismo, invitó a los empresarios namibios para participar en la próxima Feria Internacional de La Habana (FIHAV).

Comentó, además, que como resultado de esta visita se acordó retomar la Comisión Intergubernamental entre Cuba y Namibia, para elevar los vínculos económicos-comerciales a la par del excelente nivel de las relaciones políticas.

Al final de sus palabras, el Presidente cubano agradeció, una vez más, el cariño, la amistad, la solidaridad y el apoyo que recibe nuestro país de esta hermana nación africana.

Acre de los héroes, homenaje a la historia

Foto: Alejandro Azcuy Domínguez.

Directamente de la Casa de Estado, el Presidente de la República de Cuba, acompañado por la delegación oficial que participa en esta visita, se dirigió hasta el Acre de los Héroes. En nombre del pueblo de Cuba depositó allí una corona de flores y rindió honores a la historia de esta nación y a sus héroes.

Sencilla, pero muy sentida, fue la ceremonia allí realizada, en la cual estuvo presente, además, el vicepresidente namibio, Nangolo Mbumba. A pesar de la altitud y el frío abrumador de este mediodía en Namibia, la calidez de nuestro pueblo llegó también a este sitio de visita obligada para honrar el legado de esta nación cuyos valientes hijos han sabido escribir una historia admirable.

Ubicado al sur de la capital de Namibia, el monumento fue inaugurado en el año 2002 y tiene forma de polígono simétrico, con un obelisco de mármol y una estatua de bronce del soldado desconocido en el centro. Este lugar es escenario de importantes concentraciones y actos oficiales en Namibia.