Flores

Cerramos prácticamente el mes de marzo y con él nuestro invierno; y aunque en Cuba no podemos ver diferenciadas del todo las 4 estaciones, astronómicamente desde el pasado 20 de marzo estamos en primavera en el hemisferio norte.

Ese día ocurre el Equinoccio de Primavera o Equinoccio de Marzo, el momento en que los rayos del Sol inciden perpendicularmente sobre el ecuador terrestre, de manera equitativa en ambos hemisferios. Esto sucede dos veces en el año: durante el mes de marzo, en una fecha variable que abarca entre los días 19 al 21, aunque la fecha más común es el 20; y en el mes de septiembre, en una fecha entre los días 22 y 23 de ese mes, cuando ocurre el Equinoccio de Otoño. Dicha fecha puede sufrir cambios en dependencia del huso horario en que se encuentre el observador.

Otro evento que solo ocurre en los equinoccios es que la salida y puesta del Sol acontece exactamente por el este y oeste respectivamente. Ese día se alcanza la altura máxima sobre el horizonte si usted está en el ecuador, ya que se desplazará exactamente sobre su cabeza. Mientras más alejado esté del mismo, tanto hacia el norte como al sur, la altura que alcanzará el Sol será menor. En los polos, el Sol describirá una línea paralela al horizonte, irá ganando en altura en el polo norte y “desaparecerá” en el sur, dando comienzo a un día y una noche “de 6 meses”, respectivamente.

Si bien no podemos definir según el comportamiento de las temperaturas las cuatro estaciones del año, sí quedan marcados dos periodos: uno lluvioso y otro poco lluvioso, este último se extiende desde noviembre hasta abril, por lo que el cuarto mes del año se considera como un mes de “transición” entre ambas fases.

En su pronóstico climático para el mes de Abril, el Insmet (disponible en esta dirección), menciona: “Abril es el segundo mes de mayor acumulado de lluvia dentro del período poco lluvioso en Cuba. (…) La influencia del anticiclón del Atlántico sobre Cuba se incrementa gradualmente, mientras las presiones descienden sobre el continente. Los sistemas extratropicales aún juegan un papel importante en el comportamiento del tiempo y el clima sobre toda la región, por lo que es usual que los frentes fríos crucen sobre nuestro territorio. También la ocurrencia de vientos de región sur es característica del mes de abril. Las precipitaciones generalmente están asociadas a sistemas frontales y ondas de los oestes”.

En  otras palabras, aunque todavía influyen los sistemas invernales con una menor frecuencia que en los meses anteriores, estos siguen siendo responsables de la gran mayoría de las precipitaciones que se reportan en ese mes, mientras que va siendo mayor la presencia del anticiclón del Atlántico, sistema imperante en el periodo estival.

En ese mismo documento, el Insmet menciona: “Se espera un mes de abril con precipitaciones y temperaturas medias extremas en la norma en todo el país...”

Recordemos lo explicado en una entrega pasada de Ráfaga 340, cuando analizamos un pronóstico similar y las formas en que se expresan estas predicciones con un perfil climático.

El Insmet enuncia que para abril de 2023 se espera que ocurran precipitaciones en la norma en las tres regiones del país, es decir, dentro de lo que es típico históricamente para este periodo.

En cuanto a las temperaturas, en abril hay un usual incremento de las mismas respecto a los meses precedentes, algo que en los últimos años ha sido más evidente, por la tendencia al aumento que estas han tenido. Sin embargo, este 2023 las temperaturas extremas, tanto mínimas como máximas, estarán dentro de la norma.

Aunque quizás muchos no relacionen a abril con el calor, como es común hacerlo con los meses de verano, de los récords de temperatura máxima reportados en Cuba, unos 28 (cerca del 42 %,)  se han registrado en el mes de abril, incluyendo las únicas ocasiones en que se han superado los 39 grados Celsius. Esto ocurrió el 12 de abril de 2020 en Jucarito y Veguitas, ambas en Granma, con 39.2 y 39.7 grados Celsius, respectivamente, esta última la máxima absoluta. Si lo comparan con agosto, cuyos valores promedios sí son superiores, se han reportado 8 de los récords absolutos.