Doctor Ercilio Vento

El Premio Nacional “Antonio Núñez Jiménez”, máximo galardón de la Sociedad Espeleológica de Cuba (SEC), se otorgó al doctor Ercilio Vento Canosa, Historiador de la ciudad de Matanzas, según informó en redes sociales la entidad más antigua de su tipo en Latinoamérica.

Aprecio la hermandad de mis colegas en este campo en el que llevo ya 60 años, y me ha permitido conocer el mundo por debajo de la tierra, declaró en exclusiva a la Agencia Cubana de Noticias el reconocido antropólogo, perito forense, y escritor.

La espeleología cubana va más allá de la aventura, es eminentemente científica, lo que justifica la investigación en lugares peligrosos u hostiles, expresó el experto, quien reconoció los estrechos vínculos entre quienes practican esa disciplina dentro y fuera del país caribeño.

Son las cuevas reservorios naturales de fauna y de cultura que muestran los cambios geológicos; Matanzas tiene el privilegio de contar con más de dos mil, entre ellas algunos de los sistemas más importantes del archipiélago cubano, como Bellamar y Santa Catalina, ambas únicas en el mundo, apreció.

La provincia cuenta con el único catastro de cuevas existente en el país, información de interés para la geografía y la defensa, que realizamos como parte de nuestros estudios de la hidrogeología cársica, recordó Vento Canosa.

Reconoció el trabajo conjunto entre la Fundación Antonio Núñez Jiménez de la Naturaleza y el hombre (FANJ) y la SEC, que impulsan un proyecto educativo en el espacio citadino La Gruta del San Juan, donde se exhiben audiovisuales en 3D sobre el patrimonio natural cubano e internacional.

El también doctor en ciencias y autor del libro El otro Antonio, sobre el eminente geógrafo Núñez Jiménez, comentó su gratitud por recibir el galardón en el año del centenario de quien fundó la Sociedad con apenas 17 años, con el que mantuvo una relación de amistad y respeto.

Henry Delgado Manzor, integrante de la SEC en esta región, opinó que la labor del Historiador de la Ciudad de Matanzas al estudiar los misterios del subsuelo cubano está motivada por su amor a la naturaleza y la responsabilidad hacia la ciencia, y sus aportes son referentes para las nuevas generaciones de espeleólogos.