
La Habana conquistó el Torneo Clausura de la 108 Liga Nacional de Fútbol tras vencer en la final del domingo dos goles por uno a Santiago de Cuba en el estadio La Polar de la capital de la isla.
Ambos equipos construyeron opciones en la primera mitad, pero no llegó el gol hasta la segunda parte, cuando Rigual Herrera finalizó una contra en superioridad para los Diablos Rojos, según reflejó la edición digital de la publicación deportiva JIT.
Luego, Jean Carlos Iglesias fue más listo que todos apenas entrar a la cancha, y atrapó una pelota suelta en el área para anotar el empate temporal para los Leones.
El golpe psicológico para los visitantes de no poder sostener la diferencia mermó el ánimo y confundieron la táctica: el orden que les había dado buenos dividendos desapareció, y en detrimento de eso aparecieron los pelotazos largos.
Presos de la desesperación renunciaron a tener el balón y perdieron el juego interior hasta que en otra jugada de vértigo Didier Reinoso, quien levantó las gradas cuando entró de cambio en el complementario, anotó el segundo gol de los habaneros.
Apenas quedaba tiempo a los orientales para remontar la diferencia, y entonces el resto del partido se diluyó en el desespero por buscar el arco rival sin encontrarlo.
De esa forma llegó el pitazo final y los capitalinos levantaron la corona de campeones luego de 24 años sin conseguirla, desde que Francisco Fariñas los condujo al título en la temporada 2000-2001.
“Estoy muy contento, es el segundo título en el año luego de ganar el Torneo Apertura, los muchachos han hecho buen trabajo y también es lindo devolverle un título a La Habana después de tantos años sin lograrlo”, expresó a JIT, Lázaro Rodríguez, DT de los nuevos campeones.
En un partido jugado antes, Guantánamo derrotó a Villa Clara por la medalla de bronce, gracias al portero Yorlan Urgellés, quien atajó lo que pudo ser la ventaja para el Expreso del Centro en los minutos finales del partido y luego paró dos cobros en la tanda de penales, tras el 0-0 en los 90 minutos del choque.