Médico cubano
La Habana, 12 oct (Prensa Latina) Cuba comienza desde hoy a vivir un periodo de nueva normalidad frente la Covid-19, caracterizado por un restablecimiento de la actividad productiva y de servicios acompañado de un fortalecimiento de la vigilancia epidemiológica.
 
El primer ministro Manuel Marrero, al presentar el plan que avala la estrategia de trabajo en esta nueva etapa en la que se inserta la mayor parte del país, con excepción de La Habana, Ciego de Ávila y Sancti Spíritus, enfatizó en la responsabilidad de las personas, adoptando un nuevo código y estilo de vida.

El jefe de gobierno insistió en el cumplimiento y control de las medidas higiénico-sanitarias, así como de otras disposiciones que aseguren la protección de la salud, porque de lo que se trata es de retomar el ritmo cotidiano, aprendiendo a convivir con la enfermedad, dijo.

Es por ello que de conjunto con la desactivación de los consejos de defensa en las localidades que pasen a la nueva normalidad, se preservan disposiciones como el distanciamiento físico, el uso de la mascarilla y el lavado frecuente de las manos.

Asimismo, continúa la necesidad de desinfectar sistemáticamente las superficies y de prohibir la entrada a los centros de trabajo y estudio de personas con signos y síntomas sugerentes de la Covid-19 u otras enfermedades transmisibles.

La vigilancia activa en las comunidades, mediante la pesquisa con calidad, será ahora más importante que nunca, precisó Marrero, quien argumentó que ese proceder estará dirigido a la búsqueda de pacientes con sintomatologías, priorizando las unidades cerradas, los grupos vulnerables y las áreas de riesgo.

Un cambio importante en este periodo es la decisión de ingresar en el domicilio a los contactos de casos confirmados y sospechosos, de lo cual se exceptúa a los adultos mayores con enfermedades asociadas, quienes no tengan condiciones en el hogar o aquellos cuyo comportamiento social no permita un correcto aislamiento.

De igual forma, los viajeros que lleguen desde el exterior, cubanos o foráneos, recibirán el examen para la detección del nuevo coronavirus y se les aplicará el protocolo de vigilancia en aquel lugar donde transcurra su estancia en el país.

La entrada de pasajeros desde el exterior será permitida en esta etapa, mientras que los cubanos residentes podrán viajar al exterior según la disponibilidad de los vuelos.