Jair Bolsonaro

El gobierno de Jair Bolsonaro se dispone a cerrar permanentemente Más Médicos, un proyecto diseñado por el Partido de los Trabajadores en el 2013 para llevar atención de salud a las zonas más apartadas de Brasil, y en el que participaron miles de doctores cubanos.

El gobierno federal decidió cerrar el programa y reemplazarlo con uno nuevo, que todavía está siendo planificado y se presentará “pronto”, dijo este miércoles a la prensa Mayra Pinheiro, secretaria de Trabajo y Educación en el Ministerio de Salud brasileño, el puesto que supervisa Más Médicos.

El anuncio deja sin oportunidades de trabajo a los profesionales de la mayor de las Antillas que decidieron quedarse en Brasil luego de que en noviembre pasado el Ministerio de Salud Pública cubano diera por terminada su participación en el programa, debido a la agresividad y amenazas de Bolsonaro contra La Habana.

“La gente está como volviéndose loca. Hay quienes ya no tienen dinero ni trabajo”, dijo a Cubadebate una doctora pinareña que se encuentra en Brasil, pero que prefirió no dar su nombre.

De los ocho mil 471 colaboradores que se encontraban laborando en ese país cuando el 14 de noviembre se tomó la decisión de no continuar participando en Más Médicos, siete mil 635 concluyeron la misión, más del 90 por ciento, y hasta finales del año pasado no habían regresado 836, dijo el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, en un acto de homenaje a los galenos.

Un grupo de los médicos estaba casado y con familias constituidas en Brasil, por lo que decidieron permanecer allí de manera legal, mientras otros regresaron a Cuba en diciembre y luego viajaron de manera independiente a Brasil para tratar de concretar una oferta de trabajo.

“Siempre hay alguno que se quedó aunque sea para vender cocos en una playa, pero la mayoría de la gente está decepcionada porque tenía la idea de que iban a quedarse a trabajar como médicos”, dijo la doctora pinareña. “La realidad es que hicieron promesas y ahora se limpiaron las manos como Poncio Pilatos”.

En una grabación a la que tuvo acceso Cubadebate, Mayra Pinheiro asegura a los cubanos que tendrán un tratamiento preferencial. La funcionaria brasileña organizó grupos en la red social Whatsapp para “mantener informados” a quienes decidieron quedarse.

“La reunión fue muy productiva con el Ministerio de Justicia, que se pronunció sobre la legalidad de los médicos cubanos, que serían tratados con una categoría especial que les permitiría trabajar y mantenerse en el registro de Más Médicos, concediéndole la posibilidad de poder participar en el programa en los próximos meses”, dice Pinheiro en el audio compartido entre cientos de médicos y en el que pide que no lo divulguen.

La esperanza de quienes querían optar por su reingreso a Más Médicos estaba fijada en el próximo 18 de febrero. Ese día vencía la convocatoria hecha para que los profesionales brasileños ocuparan las plazas vacantes en las zonas más intrincadas del país.

Los cubanos iban a pujar por uno de los cerca de 800 puestos disponibles y que ningún médico brasileño aceptaba, pero la decisión del Ministerio de Salud les cierra las puertas.

Según las declaraciones de Pinheiro a la prensa, la idea es que el último ciclo de vacantes abiertas se cierre esta semana. Y, a partir de eso, no se hagan nuevos. Los médicos que actualmente están en el programa (no los cubanos) podrán continuar por el plazo de su contrato, que es de tres años.

La funcionaria hizo un llamado para que los extranjeros no se presenten a estas convocatorias, pues no serán aceptados. Y esa es precisamente la situación de los cubanos.

La única posibilidad de poder ejercer su profesión queda en la revalidación del título, un proceso engorroso y demorado que está controlado por el Colegio Médico del país.

La prueba, manejada por el Instituto Nacional de Estudios y Pesquisas Educacionales, se realiza en dos fases y no tiene una fecha fija para la convocatoria. La edición de 2017 debe ofrecer los resultados este mes, casi dos años después.

Además, de acuerdo a las leyes vigentes, sólo podrán realizar el examen los médicos cubanos que hayan recibido la residencia permanente.

Promesas desde Estados Unidos

Capturas de pantalla de los mensajes enviados a un médico cubano por organizaciones en Estados Unidos. Foto: Cubadebate

El grupo de profesionales en Brasil ha sido contactado también por instituciones de terceros países con promesas de legalizar su estatus en Estados Unidos.

Esta convocatoria del grupo Solidaridad sin Fronteras (SSF), con sede en Hialeah, promueve la migración de los profesionales a Estados Unidos y refiere que el grupo hace esfuerzos para reactivar el polémico programa de Parole para Profesionales Médicos Cubanos.

Los senadores de origen cubano y opositores a cualquier acercamiento con La Habana, Marco Rubio y Bob Menéndez, introdujeron recientemente un recurso en el Congreso estadounidense que busca restablecer un programa de robo de cerebros dirigido a los galenos cubanos que cumplen misión en el exterior.

Esta medida fue establecida por el gobierno de George W. Bush y derogada al final del mandato de Barack Obama. Durante los años que se mantuvo vigente (2006-2017), esta política constituyó un incentivo ilegal para que el personal cubano de la salud que colaboraba en terceros países abandonara sus misiones y emigrara a los Estados Unidos.

El programa causó daños a la cooperación médica internacional de Cuba y en especial a las naciones pobres del tercer mundo que se benefician del aporte de los profesionales de la Isla.

De acuerdo con el ministro de Salud Pública, José Angel Portal, más de 600 mil cubanos han prestado servicios médicos en más de 160 países durante los últimos 55 años. Asimismo, en Cuba se han formado de manera gratuita 35 mil 613 profesionales de la salud de 138 países.

Aunque el Minsap no se ha pronunciado en específico sobre su postura con los cubanos que incumplieron sus obligaciones y decidieron permanecer en Brasil, la política aplicada hasta ahora permite la reincorporación de los galenos a sus puestos de trabajo anteriores.

El ministerio lo ratificó en el 2017, tras el anuncio del fin del programa de Parole para Profesionales Médicos Cubanos por parte de Estados Unidos.

“En este nuevo escenario, el Ministerio de Salud Pública reitera la disposición de permitir que los profesionales del sector que abandonen sus misiones de colaboración regresen a Cuba y se reincorporen al Sistema Nacional de Salud, como Io han venido haciendo desde el año 2014, de acuerdo con las regulaciones migratorias vigentes”.