Cuba y UE refuerzan cooperación en agricultura sostenible

Cuba y la Unión Europea (UE) refuerzan hoy los vínculos de cooperación en la lucha contra el cambio climático, por una agricultura y energía más sostenibles, según un diplomático de ese bloque de naciones.

En conversación con Prensa Latina, el embajador y jefe de la delegación de la UE en Cuba, Alberto Navarro, consideró además en ese sentido muy importante el Programa de Apoyo Estratégico a la Seguridad Alimentaria Sostenible en Cuba (SAS), cuya implementación comenzó recientemente y durará seis años.

Este proyecto, que cuenta con un respaldo financiero de la UE de cerca de 20 millones de euros, persigue incrementar de forma sostenible la producción de alimentos de calidad para responder a la demanda local, específicamente mediante la aplicación de enfoques innovadores, ambientales y resilientes.

Tiene como responsables al Ministerio de Agricultura (Minag) y la UE y cuenta también con el apoyo monetario del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

En el intervienen además los ministerios de la Industria Alimentaria, Salud Pública, Comercio Interior, Economía y Planificación, Educación Superior, Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente y Comercio Exterior e Inversión Extranjera.

El programa es muy importante para la cooperación de la UE con Cuba, que se está reforzando notablemente, y en la que hemos triplicado los fondos en los últimos dos años, explicó Navarro.

Pero más allá de la importancia del volumen de fondos, acotó, es la confianza que tenemos con los socios del gobierno cubano, en este caso el Minag.

No puede haber soberanía sin seguridad alimentaria y aquí la UE quiere poner su granito de arena y contribuir con este proyecto, el cual sigue a otros como el Basal (Bases Ambientales para la Sostenibilidad Alimentaria Local), y el Agrocadenas, refirió.

Queremos contribuir, dijo, a que Cuba tenga mayor soberanía alimentaria y pueda depender menos de las importaciones, y al mismo tiempo desarrollar productos sanos y de calidad, que es lo que deseamos todos.

La UE también implementa en esta isla un proyecto con un financiamiento casi similar, de cerca de 20 millones de euros, relacionado con el uso de la energía renovable.

En este sector estratégico deseamos ayudar a que haya mejor eficiencia, más uso racional de los recursos energéticos, menos combustibles fósiles y que Cuba aproveche las energías renovables, señaló Navarro.

Definitivamente trabajamos mediante la cooperación en las áreas de una nueva economía verde, de la lucha contra el cambio climático, de una agricultura y energía más sostenibles que ayuden a la agenda 2030 de Naciones Unidas.

A juicio del Embajador, las relaciones entre la UE y Cuba, discurren por un buen momento, 'yo diría que de luna de miel después de 20 años de vivir de espalda en 1996-2006', sostuvo.

Desde diciembre de 2016 con la firma del Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación(ADPC), las relaciones no han hecho más que estrecharse y mejorar sobre la base del respeto y la confianza, comentó.

Y ahí están los resultados de dos años de la entrada en vigor del ADPC: Dos consejos conjuntos, en Bruselas y La Habana, multitud de diálogos políticos y sectoriales, multiplicados por tres los recursos financieros y cada vez más confianza. Creo que estamos trabajando muy bien europeos y cubanos, consideró.