Camagüey, 28 may.- Académicos e investigadores de varias provincias insistieron, en esta ciudad, en la aplicación de una economía ambiental en el sector empresarial para obtener valoraciones contables de los recursos naturales existentes, en cuanto al manejo de estos y su conservación.
Durante la celebración de un taller regional para el intercambio de experiencias, los especialistas debatieron acerca de la necesidad de preservar el entorno ante las actividades del hombre, no solo con ánimos de protección, sino también de evitar futuros gastos en proyectos de recuperación para determinadas áreas dañadas.
Entre los casos analizados se ubicó el desarrollo del turismo de sol y playa en los cayos al norte de Cuba, y la importancia que tiene durante las labores constructivas conservar la flora, la fauna y el agua marina de estas zonas para la comercialización futura de las instalaciones.
Marlene Cañizares, presidenta de la Sociedad de Economía Ambiental, comentó a la ACN que desde la puesta en marcha del proceso de perfeccionamiento del modelo económico de la nación se plantea la necesidad de insertar esta disciplina en las entidades y ya se aprecian avances, pero aún queda mucho por hacer.
La también profesora de la Facultad de Contabilidad y Finanzas de la Universidad de La Habana, dijo que aunque existe una Ley de Medio Ambiente, con instrumentos y regulaciones destinados a la protección del entorno, faltan documentos normativos que obliguen a la empresas a llevar la contabilidad ambiental.
Auspiciado por la Asociación Nacional de Economistas y Contadores, en este encuentro se señaló la necesidad de fomentar estas posiciones y conceptos afines en el sector no estatal de la economía, y en la población de forma general, para lograr un desarrollo sostenible.