El sector industrial cubano labora hoy por el fomento de los encadenamientos productivos, la sustitución de importaciones y el incremento de las exportaciones según se constató durante la recién concluida Convención Cuba Industria 2018.
La cita, además de la presentación de novedosos productos y tecnologías, fue un espacio propicio para el intercambio entre empresarios del patio con sus pares extranjeros.
El foro de negocios celebrado en el capitalino recinto ferial de Pabexpo, en el que se efectuó una muestra expositiva asociada a la convención, se diseñó con el objetivo de establecer alianzas estratégicas, proponer oportunidades de inversión en el sector y promover los rubros exportables, según declaró oportunamente la subdirectora de inversiones y cooperación del Ministerio de Industria, Ana Cabrera.
Con una fuerte presencia extranjera, en la que destacaron importantes socios comerciales de Cuba como China y Rusia, el encuentro constituyó una plataforma favorable para el fomento de sectores estratégicos tales como el turismo, la agroindustria, el transporte, las fuentes renovables de energía y la construcción, abundó igualmente la funcionaria.
Asimismo, durante la cita se divulgaron estrategias de desarrollo en las esferas del reciclaje, de la industria ligera y en el ámbito de la industria sideromécanica.
En el caso de la metalmecánica, por solo citar un ejemplo, hay un grupo de objetivos en los que se trabajan y que incluyen la inserción de tecnología y de transferencia del conocimiento.
Dicha política debe favorecer a una mayor participación de esta rama industrial en la sustitución de importaciones y en el incremento de las exportaciones, reveló el director de desarrollo del Grupo Empresarial de la Industria Sideromecánica, Mario Hernández.
Según reveló recientemente el Ministro de Industria, Salvador Pardo, la reunión de todos los sectores del gremio es vital para el impulso de estas esferas estratégicas en pos de cumplimentar el programa de desarrollo planteado por la máxima dirección del país hasta el año 2030.
La voluntad del gobierno cubano de promover la cartera de oportunidades con el fin de atraer la inversión extranjera directa se hizo patente también durante la celebración del evento.
Esta disposición, manifestó Pardo, favorece la creación de los proyectos inversionistas conjuntos y de complementariedad tecnológica que influyan directamente en el incremento de la sustitución de importaciones.
A los programas de reanimación de la industria cubana se suma hoy el quehacer de las empresas mixtas conformadas tras la aprobación de la Ley de Inversión Extranjera que, según concibe el plan de desarrollo hasta el 2030, promete contribuir de manera determinante a la construcción de un socialismo sostenible y sustentable, consideró.