Benicio del Toro conversa con artista cubano

Benicio del Toro se paseaba con gorra y zapatillas por los salones del Hotel Nacional, mientras una estrella mundial de la danza, Carlos Acosta, y la reconocida realizadora Icíar Bollaín hablaban de su película.

El tono relajado de figuras internacionales del arte transmitía una sensación de asombro entre decenas de turistas que acto seguido, reaccionaban en busca de las sacrosantas selfies.

Esta suerte de milagro del jet-set forma parte del 40 Festival del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana que transcurre entre luminarias y más de 400 películas, documentales, cortos, animados y conferencias.

El espigado puertorriqueño Del Toro, Oscar por Traffic y actor casi infaltable en Hollywood en la actualidad, se interesó también por los comentarios del guionista escocés Paul Laberty, cercano colaborador de Ken Loach, de Acosta y Bollaín.

Mientras seguía el frenesí por la cinta Yuli, que narra parte de la vida de Acosta, exprimera figura del Royal Ballet de Londres, también llamaba la atención la reconocida actriz cubana Laura de la Uz y los productores del aclamado film.

Empero, Yuli no compite en la cita habanera como tampoco Roma, otra que pisa fuerte con la mirada en los Oscar y coloca al mexicano Alfonso Cuarón (estatuilla dorada por Gravity) en la órbita estelar latinoamericana en el mundo.

Si de Roma se trata y por ser el nombre de un barrio de Ciudad de México, no necesariamente todos los caminos conducen a la capital italiana y otras apuestas, igualmente fuera de concurso, deslumbran a los espectadores en la capital cubana.

Son los casos de los filmes The Sisters Brother, un violento western dirigido por el francés Jacques Audiard, León de Plata en Venecia este año; la notable BlacKKKlansman de Spike Lee; y Doubles vies, conducida por Olivier Assayas y con los protagónicos de Juliette Binoche y Guillaume Canet.

A la expectativa -en especial de los huéspedes del Hotel Nacional- el festival tomará más vuelo en su recta final hasta el 16 de diciembre con el prestigioso documentalista estadounidense Michael Moore, después de que el serbio Emir Kusturica dejara el escenario caliente.

Los rostros del multifacético actor Matt Dillon, y la insoslayable hija de Charles Chaplin, Geraldine, entre otros, resaltan el raigambre del encuentro del Nuevo Cine Latinoamericano en sus cuatro décadas de existencia.